Tras la lectura de los apuntes sobre el sistema educativo español, los diferentes caminos que se pueden seguir, las titulaciones, las carreras... Lo que más me llamó la atención fueron los estudios complementarios y superiores. Por un lado amplíe información que conocía de los másters y aprendí más sobre los doctorados. No me había planteado la opción de hacer un doctorado para especializarme en mi carrera. Tampoco sabía que tuviera dos periodos (formación e investigación), pensaba que consistía sólo en una investigación muy detallada y elaborada sobre algún campo de tu carrera, el cual exponías ante un jurado y si aprobabas, te convertías en un doctor.

Tampoco sabía los diversos objetivos de los diferentes cursos que van desde Educación infantil a Educación Secundaria Obligatoria. Pensaba que cada curso estaba diseñado para que intelectualemente fuera asequible para los alumnos, y que de esta forma sea posible su desarrollo intelectual y cultural, pero no sabía que también tenían objetivos dirigidos al desarrollo del ámbito social.